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lasnochesdeMcNulty

Almería - Real Madrid. 1 - 1 (Estadio de los Juegos Mediterráneos, 16 de enero)

Sorpresa...pero no tanto. Desde luego, a priori nadie podía esperar un tropiezo del Real Madrid ante el hoy por la mañana colista. Después de ver el partido, quizás no es tanta la sorpresa.

Al Madrid le costó meter intensidad al partido. Parecía tener claro que tarde o temprano llegaría su gol y teniendo en cuenta los esfuerzos realizados y, sobre todo, por realizar en este mes de enero con Liga y Copa cada tres días, decidió tomarse un ligero descanso. Sorprendentemente lo pagó caro con la pérdida de dos puntos que jamás debió dejarse en Almería. 

La primera parte fue sosa y con pocas ocasiones. Un poco de empuje del de siempre (Cristiano Ronaldo), unas gotas de Özil, otras de Marcelo y poco más. Del equipo local tampoco se tuvo noticias más que del bullicioso Piatti, un astuto pigmeo.

El equipo blanco dejó de sestear al entrar en el segundo tiempo. Le metió una marcha más al partido y empezó a llegar con más presencia al área rival. Sin embargo, cuando menos lo esperaba recibió un extraño gol, más por falta de tensión defensiva que por mérito del rival.

Mourinho reestructuró al equipo, que pasó a jugar con tres defensas, y tras unos minutos de dudas encerró al equipo local. Granero obtuvo el gol del empate en un buen contraataque bien interpretado por Benzema, que salió en sustitución de Kaká y lo mejoró ostensiblemente. 

A partir de entonces algunas llegadas más del Madrid, pero no excesivamente claras. Las continuas interrupciones que el árbitro permitió a los almerienses rebajaron la tensión del choque. El Madrid se empantanó y no consiguió inquietar a Diego Alves más que con algún cabezazo de Sergio Ramos y algún disparo desde fuera del área de Xabi Alonso, hoy desaparecido, y Cristiano Ronaldo.

Únicamente dos libres directos de CR7 inquietaron al Almería en el descuento: el primero parado con la mano dentro de área por M'Bomi, que el árbitro sacó fuera, y el posterior zambombazo que se estrelló en el larguero reflejando la suerte esquiva que tuvo el Madrid esta jornada, pero que en cierto modo también se buscó por no acometer el partido con la determinación y ambición de los últimos choques.

Muy probablemente el Barça quede a cuatro puntos de distancia en lo alto de la clasificación en el ecuador de la Liga. Tocará remar contracorriente, así que veremos qué remeros toman la responsabilidad de revertir la situación y cuáles deberán ser enviados a galeras a la conclusión de la temporada.

Nota post partido: se rumorea que Van Nistelrooy podría ser el '9' deseado por el Madrid para cubrir la baja de Higuaín. Nada me haría más feliz. Es un excelente profesional, un delantero voraz, una pesadilla para la defensa contraria y un tipo al que admiré en su anterior etapa en el Madrid. Ojalá venga y ponga un broche de oro a su extraordinaria carrera futbolística en el equipo de Chamartín.

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